martes, 6 de agosto de 2013

Cuando algo me consume, me arrodillo.

Hoy me levante cansada. Dormí suficiente, pero estaba cansada.
Ayer tuve un día normal, como cualquier otro. Pero a mi me pareció triste.
Por la noche me disfrace de lo que no quiero ser, una mujer angustiada.
Parece tonto decir, pero muchos lo dicen. Estar triste es una decisión.
No me gusta discutir, debe ser que es así.
Sentí que estaba llena, llena de algo, no se que es.
Mi interior se volvió un no se qué, muy en el fondo siento que puedo cambiarlo todo.
Pero cuando quiero cambiarlo no me entra la máscara.
Quisiera hacer ajustes en mis estados de ánimo.
Me encantaría ser una especie de mecánico de ánimo, 
sacar lo que quiero cuando quiero y suplantar por algo nuevo. 
Já! Parece muy fácil, no? 
Alguien quiere consolarme pero no puede lograrlo. 
Es que no se trata de quien quiera cambiarme, se trata de que yo tengo que cambiarme. 
Pero no puedo. 
No puedo cambiarme. 
Es como si estuviera en un mar de signos de interrogación. 
Yo quiero saber todo, pero no hay respuestas a muchas preguntas. 
Eso me consume. 
Me consume no saber. Me consume la incertidumbre. 
Y ahí es cuando lloro, y lloro, parece interminable. 
A veces parece que lloro sin razón. Tengo ganas de llorar. 
No se si me hace bien o me hace mal. Pero lo necesito. 
A veces pienso que no tengo que hacerlo mas, 
porque cuando cierro los ojos y veo todo oscuro, 
a los lejos, hay una luz, amarilla, brillante. 
Esa luz puede ser un milagro, una esperanza, o un consuelo. 
Algo bueno es, pero parece inalcanzable. 
La luz y la oscuridad no pueden estar en el mismo lugar. 
Por eso, o la luz se consume en si misma, o la luz consume todo lo oscuro. 
Pero puede ser que antes de consumirse o consumir pueda permanecer ahí? 
Constante, vibrante. 
Me gustaría saber pintar, grabar un disco, andar a caballo, saber plantar, ser escritora. 
Quiero ser todo eso. 
Hoy me levante, me mire al espejo y dije: qué te pasa? 
Mi pinta era un desperdicio. 
Yo no era así. 
No quería estar mal, asi que busque en youtube un video de optimismo. 
Si, muy bajo lo mio. 



Después, salí a comprar. 
Cuando volví hice lo que tenia que hacer:
me arrodillé.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario