lunes, 22 de julio de 2013

Sobre el Bizcochuelo de Cacao



¿Cuántas veces lo intenté? Imposible contar, aunque dos intentos para mi son muchos y pierdo la paciencia muy fácilmente.
¿Lo logré? Si, a duras penas.
Esta es una historia pequeña sobre lineas, pero larga y compuesta en sentimientos y días. Esta es una historia sobre mi enemistad que termino siendo una amistad verdadera con mi queridísimo amigo: el bizcochuelo de cacao.
Para hacer bien resumido y que los lectores no se aburran empieza así:
Empece mis estudios de Pastelería y Panadería a comienzo de este año 2013 y una de las primeras clases es sobre "bizcochuelo", claro... ¿como un pastelero puede ser pastelero si no sabe hacer un pastel?
En la clase nos enseñaron una formula fácil y básica que sirve para hacer cualquieeeer bizcochuelo que se te ocurra: 30 gramos de harina y 30 gramos de azúcar por cada huevo. O sea, si tu torta es de 4 huevos vas a necesitar 120 gramos de harinas y 120 gramos de azúcar. ¿El secreto? EL BATIDO. Batis a punto letra los 4 huevos con los 120 gramos de azúcar, despues agregas esencia de vainilla, y por ultimo y con MUCHO amor: CON ESPATULA en forma envolvente los 120 gramos de harina previamente tamizada. Molde enmantecado y enharinado. Horno 150 grados C por 30 minutos, y ¡OJO! No abrir el horno antes de que pasen 10 minutos, sino el bizcocho no se levanta.
Mis intentos fueron muchos. Me puse nerviosa todas las veces que tuve que hacer una torta de bariloche. Una casi la tiré al piso con mucha bronca. Llegue al punto de odiarla!

EL PROBLEMA: 4 huevos eran pocos para un molde de torta nro. 22.
LA SOLUCIÓN: comprar un molde de torta nro. 20.
EL SECRETO: aparte del batido, mucha paciencia y amor.

Aprendí: que la vida lamentablemente NO es tan sencilla como una receta de bizcochuelo, uno tiene que descubrir el secreto, averiguar los posibles problemas, y encontrar las soluciones. Venimos al mundo con una receta, aprendemos el procedimiento para hacerlo bien, sabemos del resultado final, de las posibles malas consecuencias si erramos en una medida, y... somos los encargados de mirarnos a nosotros mismos y poder cambiar lo necesario, para que el resultado, sea el mejor :) Tan rico como una torta de cacao :)